Por lo general, la celda emew Plate se usa para electrolitos más concentrados, cuando la concentración del metal objetivo es mayor a 10g/L. A menudo se usa para la recuperación de cátodo de cobre, níquel y estaño, en una variedad de aplicaciones, incluyendo la extracción minera, la refinación y el reciclaje, y puede asociarse también con la extracción de solventes (SX) y el intercambio iónico (IX) cuando es necesaria la concentración previa del metal objetivo.

Las celdas emew Powder, totalmente automatizadas, usan la misma filosofía básica que las celdas emew Plate, sin embargo, están diseñadas para producir un polvo metálico. Las celdas emew Powder, por lo general operan a concentraciones más bajas del metal objetivo (<5 g/L), con una densidad de corriente eléctrica más alta, y una tasa de flujo más baja que sus contrapartes de celda con depósito en placa. El polvo metálico formado sobre la superficie del cátodo, se cosecha de forma automática mediante una metodología de desplazamiento por enjuague.
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La naturaleza cerrada de estas celdas, a la par del enjuague automático, las hace encajar de manera ideal para aplicaciones en metales preciosos, como plata, oro-plata y paladio.  El tener un mismo punto de obtención para los metales preciosos, mejora la seguridad, y facilita la contabilidad metalúrgica. Además de los metales preciosos, los sistemas emew Powder se usan también para producir polvos especiales, como los polvos electrolíticos de cobre níquel, así como bismuto y arseniuro de cobre.